La aceleración en el impacto social que ha tenido la tecnología ha sido extendida. Los volúmenes del conocimientos, dan como predicción, a un 90% de la población conectada a internet. Caminado de esta manera en un mundo físico y virtual continuamente, dejando en el centro de todo esto a los niños, en un dinamismo necesario.
Estos pequeños usuarios de tecnología, son cada vez más jóvenes, pero su exposición a esta es cada vez mayor, por tiempo prolongados, promediando que su uso diario va en promedio de 7 horas diarias, un impacto social, en el bienestar y en la salud, pero todo esta exposición plantearse ideas de lo que ve, que consumen, porque son estos factores afectarán directamente en su desarrollo. Aunque la interfaz brindan aprendizaje y entretenimiento, lo que se oculta son posibilidades como ciberacoso, adicción, contenidos no aptos, radicalización, estafa, una problemática de su naturaleza veloz y constante, dejando espacios y brechas en muchos campos.
A esto se suma el vacío de la edad, los comportamientos y los consumos en la red son totalmente diferentes, creando un grupo de dudas acerca de los comportamientos, haciendo a un lado la instrucción sobre consumo responsable de la red, pero también es una mirada a lo interesante que pueden ser estos comportamientos para la educación.
La creación de una conciencia por medio de unas inteligencia emocional como seguridad, comunicación, seguridad, uso, identidad, derechos, alfabetismo, todo aplicado a lo digital, todo con la finalidad para poder adaptar y enfrentar restos.
IDENTIDAD: Una conciencia que les permitirá crear, una persona en el entorno digital, basada en sus percepciones, valores, virtudes y moralidad, un percepción de uno sobre la red, todo para tomar una conciencia propia sobre las formas en como una interactúa en la red.
USO: Un dominio más completo de dispositivos, medios, y capacidades en la red, todo esto les dará un control, que permitirá que el infante puede manejarse dentro y fuera de la red de manera adecuada.
SEGURIDAD: Poder plantearse de manera racional espacios en los cuales se está exponiendo a diferentes riesgos, con la publicación, búsqueda, contenidos digitales. Limitando de esta manera el riesgo al acceder a contenidos problemáticos. Estas prácticas lo hacen más consciente en la práctica y uso de internet, un uso más responsables de las herramientas.
EMOCIONAL: La construcción de unos lazos sociales estables, que no lo empujen a refugiarse en la red, o en caer en un espiral de emociones equivocadas, además es un fortalecimiento para la construcción de buenas relaciones, dentro y fuera de la red.
COMUNICACIÓN: El poder crear una reticularidad, para encontrar una colaboración, medios y formas de expresión, redes para poder explotar sus afinidades, o explorar desde puntos de vistas diferentes la sociedad.
ALFABETIZACIÓN: El poder discernir los tipos de contenido, lo que sirve, lo que no, su valor, su calidad, las posibilidades de compartir contenidos, crearlo, generar unas competencias de pensamiento, racionales, dirigido a uso computacional.
DERECHOS: Verse como un ser social dentro de la red, conocer sus derechos a la privacidad, a la propiedad intelectual, la libertad de expresión, a protegerse de ser vulnerado, de esta forma también, plantearse la relación con el otro dentro de la red, las libertades que se tienen, al igual que las responsabilidades desde su persona a el entorno.
La práctica de todas estas habilidades vienen con una carga de responsabilidad gigante de las personas encargadas de crear el conocimiento, de brindar herramientas y de formar a el ser social, ya que su uso se hará más racional y responsable con unas bases claras, es lo humano jugando en la red, tasando los valores sociales, crearles una libertad dentro de la red para no caer en el círculo vicioso del dominio.